La practica del buceo por «discapacitados», sé esta empezando a difundir en el mundo. Personas con compromisos tanto físicos como psíquicos están empezando a disfrutar plenamente del mundo del buceo, hasta tal punto que ya se habla de una nueva pedagogía y metodología para la enseñanza, de estos colectivos. Para las personas con deficiencias mentales el contenido de la misma es aprendido de manera variada y lúdica, repitiéndose los ejercicios clase a clase hasta ser asimilados dependiendo de las capacidades del alumno.
Dentro de los trabajos a realizar, es llevar al discapacitado a una adaptación de un nuevo mundo, un mundo que le presenta nuevas necesidades y nuevas aprensiones que le generan curiosidad. La idea es ir llevándolos por un proceso gradual, que les permita finalmente llegar a la inmersión en mar abierto, en compañía de monitores de buceo.
En la planificación de los ejercicios adecuados para obtener la acuaticidad indispensable en un «futuro buceador», es necesario adaptar nuestra metodología a las especiales características de estos alumnos, es decir, hay que plantear la actividad física como un juego en el agua, de esta manera aprenden de una forma amena y lúdica, repitiendo los ejercicios poco a poco hasta que se adapten, dependiendo de sus capacidades.
Los beneficios para los discapacitados que realizan estas actividades son amplias, no solo por la nueva esfera social de desarrollo que encontraran, sino por que en el mundo submarino encuentran un espacio mas para el desarrollo de su personalidad y aumentan la confianza en ellos mismos.
Otra de las grandes ventajas que ha traído esta actividad, es que la familia encuentra un espacio mas para desarrollar su vida, y para encauzar una serie de procesos terapéuticos, que no solo fortalecen a la familia, sino que fortalecen la relación social entre los niños.
Gracias a la metodología adaptada, recursos variados y adaptando la técnica a cada niño, éste puede practicar una actividad deportiva que le resulta gratificante y enriquecedora, poniendo en juego sus estructuras emocionales, mentales y motrices e incorporar este nuevo deporte (buceo) en su vida.
Se aumenta también la posibilidad de mejorar su equilibrio psicológico y le ayuda a relacionarse e integrarse con el mundo exterior, haciendo que desarrolle más actividades mentales y éticas, las cuales son esenciales para su proceso de adaptación social. Se les enseñan las normas teóricas básicas del buceo con escafandra autónoma, a respirar con dichos equipos y que sientan la sensación de ingravidez que supone su practica.
Estos cursos se realizan bajo supervisión medica y de instructores de buceo. Los cursos se harán con grupos de 10 personas, y se realizaran en la piscina cubierta del Polideportivo. Solo tendrán que llevar el traje de baño. Todo el equipo necesario, lo suministra la organización.